martes, 21 de septiembre de 2010

Borrón y cuenta nueva

"Si lloras por haber perdido el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas"

No he sido nunca consciente de los cambios que se pueden producir en un año, quizás porque nunca me habían ocurrido tantos.
Pienso en un año, 365 días (suelo contar los años de septiembre en septiembre… manías de una) y hago balance y la única palabra que me sale es arrepentimiento.
Buscando en la RAE, intentando comprenderlo me aparece: “Sentir pesar por haber hecho o haber dejado de hacer algo”. Y si, desgraciadamente es la descripción de este año.

El ser humano es el único que tropieza dos veces con la misma piedra, o tres o cuatro… Cierto. Muy cierto. En algunos días de mi año 17 he pensado en que debía dejar de arrepentirme, cerrar etapa y comenzar una nueva. Nunca lo hice. Quizás el miedo, ese que tanto nos perturba. Miedo hacia cosas nuevas. Parte de mi cuerpo no quería echar el cierre y por lo tanto era imposible dejar de arrepentirme de cosas que jamás sucederán. Porque dime: ¿Cómo se vive donde no estás? Ahora aparece de nuevo la palabra arrepentimiento… por no saber vivir, no querer, no poder…
He perdido infinidad de oportunidades por vivir en un mundo que no era el mío. Pero no ocurrirá lo mismo, el ser humano es capaz de tirar la piedra donde tanto tropieza, asi que: ¿Por qué vivir en un mundo donde ya no estas? ¿Por qué arrepentirse de eso que ya no puedes recoger?

Concluyendo mi balance anual: negativo. A la hora de arrepentirme de la nada, ya no puedo hacer nada asi que: ¿porque seguir pensando en ello?