miércoles, 14 de diciembre de 2011

Y sin embargo, ella decidió vaciar su vida en vasos de plástico mientras los demás intentaban beberse unos a otros. "Es lo que tiene la soledad", solía decir. Aquel vaso se derramó... O eso dicen

"Trate de describir el tedio y la constancia de...
algunas cosas verdaderas, creí que duraderas...
Conté hacia atrás para dormirte y... fracasé"


Era tarde, pero no tanto como para olvidar. Con las puertas abiertas decide caminar en dirección a ninguna parte, en dirección a los recuerdos... Por el camino va encontrando historias, que en su momento desechó por inútiles. Resulta que ahora son bastante importantes. Todas cuentan para saber de verdad lo que ocurrió.
Conforme iba caminando, iba encontrando más y más... Su preocupación iba en aumento. No era posible. Tal vez ella vivió en una mentira y no se dio cuenta hasta salir de ella...
Temblando, intentaba sostenerse. Sopesaba la idea de haber vivido una santa trinidad.

El camino iba llegando a su fin pero ella ansiaba saber más, más sobre ese pasado que ahora le parecía inverosímil. Una vez visualizada la última pared, comenzó a cavar, entre sus recuerdos en busca de aquellos que si que enterró.
Si no los encontraba, ella misma los creaba, con sus manos, con el barro de los recuerdos...

Lo que ella no sabía es que, conforme creaba y encontraba su pasado, perdía sus días en el presente.

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